Estamos ante una oportunidad que no podemos desaprovechar.
Este miércoles 6 de febrero tuvo lugar la sexta reunión de la Mesa Negociadora del Convenio Colectivo del Fútbol Femenino en la cual se abrió la posibilidad de alcanzar una mejora histórica en las condiciones laborales y salariales de las futbolistas profesionales españolas y dar un gran paso en la profesionalización del fútbol femenino. Para ello será imprescindible que los tres sindicatos negociadores, a saber UGT, AFE y Futbolistas ON, y la Asociación de Clubes de Fútbol Femenino (ACFF) colaboren para solicitar la financiación que la Liga Iberdrola necesita para su desarrollo, así como para la mejora de los salarios y derechos de las futbolistas.
En este sentido, la ACFF ha aceptado una propuesta que Futbolistas ON llevó a la mesa negociadora el pasado 20 de diciembre de 2018, y a la que se sumó UGT. Esta consistía en constituir una Mesa Transversal entre sindicatos y asociación de clubes para unir fuerzas en busca de una mejora de la financiación que permitiese hacer realidad nuestras demandas salariales y de protección social.
Como quiera que la ACFF ha entendido la importancia del apoyo sindical en el desarrollo de la competición, en Futbolistas ON creemos firmemente que no podemos fallar a las futbolistas, pues ahora es un momento decisivo en el que, de no hacerlo, los sindicatos nos retrataremos. Si apoyamos la entrada de financiación a la competición, permitiremos un desarrollo que profesionalice la actividad y lograremos importantes subidas salariales para la temporada que viene, lo cual supondrá un cambio completo en las condiciones.
En Futbolistas ON tenemos muy claro, y así lo queremos hacer público, que los sindicatos que no apoyen una postura conjunta para incrementar la financiación del fútbol femenino español, serán responsables de perder una oportunidad que difícilmente volverá a aparecer y que condenará a la mayoría de las futbolistas a cobrar por debajo del salario mínimo, como sucede hasta ahora y es precisamente lo que pretendemos cambiar. En nuestra mano, siempre tendida, está.